Aunque ahora es una práctica que parece estar en auge en realidad es algo que se ha hecho desde siempre, unas veces por necesidad, otras por comodidad y muchas otras por placer.

Está claro que todos los bebes se relajan y duermen mejor si los ponemos en contacto con nuestro cuerpo, es un placer al que ninguno quiere renunciar, pero no solamente ocurre en los primeros meses, a menudo, los niños lo siguen prefiriendo durante unos años y la verdad es que para los padres esto también resulta placentero.

Al principio resulta fácil hacerle un hueco a un bebe, cualquier cama puede ser adecuada para ello, pero cuando van creciendo y si a la vez se amplía la familia, parece necesario también ampliar el espacio para dormir.

A menudo las parejas piensan en esos momentos que la solución es una cama cuanto más grande mejor y ponen los ojos en medidas de 180 o incluso de 210cm de ancho, es una posibilidad, pero también es bueno tener en cuenta que pasada esta fase una cama tan grande deja de ser tan atractiva porque puede llegar a resultar una cama fría.

Lo ideal es poder ir acoplando elementos de forma que se puedan añadir o quitar según los diferentes momentos y necesidades.

Estructura de somier doble BasiKo normal y BasiKo Txiki en el costado.

Cuando los niños son pequeños las camas bajas resultan muy interesantes pues a ellos les resultan más cómodas y seguras, en este sentido hay varias posibilidades que consideramos buenas:

Crear un espacio de tatamis en el suelo donde es fácil poner junto a un futon de 140, 150 ó 160cm. de ancho para los padres y un Futon Cuna de 60x120cm. o un Futon Txiki de 70x140cm., esta medida puede ser buena desde sus primeros meses hasta los 7 u 8 años por lo menos.

Estructura de somier BasiKo-Txiki. Basiko-Txiki con futon de 140cm de largo.

Jugando con las medidas de 3 tatamis de 70, 80 ó 90cm. de ancho, permiten crear un espacio amplio donde además de dormir se podra jugar durante el día si se recogen los futones. Son muchos los pediatras que aconsejan dejar que los niños jueguen sobre él porque es una superficie muy adecuada para desarrollar bien la sicomotricidad del niño.
Esta opción permite en una segunda etapa donde el niño prefiere ya tener su propio cuarto y cama adaptar los elementos a la nueva circunstancia. En el cuarto de los padres se pueden mantener 2 tatamis de70, 80 ó 90cm. de ancho o bien en el suelo o bien elevando entonces con una estructura de cama de tatamis y el niño puede formar su nueva cama, bien integrando el tatami en una base o bien manteniéndolo en el suelo o sobre un somier BasiKo.

Somier BasiKo con tatamis

  • El Futon Cuna de 60x120cm. o el Futon Txiki de 70x140cm. doblado por la mitad y con una funda adecuada puede ser un elemento de apoyo formando un puf o un dado si se añade un cojín de 60x70cm.
  • Otra opción puede ser unir somieres Ximples u Open que quedan perfectamente alineados y al ras, se puede colocar junto a un somier de 140 de 150 o de 160cm. de ancho, otro de 70 o 80cm. de ancho, esto permitiría poner una funda protectora que uniera los dos colchones.
  • Una tercera opción también puede ser colocar un somier BasiKo-Txiki, junto a otros dos somieres BasiKos, pueden ser de 70cm. o 80cm. de ancho, al principio se pueden colocar todos unidos con sus correspondientes futones, pero pasado el tiempo que se considere adecuado se pueden reconvertir en camas Ximples u Open con sus distintos complementos como mesillas cabezal o cajón.

El somier colecho BasiKo-Txiki tiene diversas opciones para su reconversión, cuando el niño crece y necesita una cama más amplia:

Estructura de modelo de somier Ximple de 080cm. de ancho, con el somier de láminas BasiKo en el suelo. Modelo de somier Ximple de 080cm. de ancho, utilizando el somier de láminas BasiKo que estaba en el suelo.

  • Este somier se puede reconvertir en un somier Ximple, Open o Lit añadiendo una tercera parte al somier BasiKo-Txiki y las patitas correspondientes.
  • El Futon Cuna de 160x120cm. o el Futon-Txiki de 70x140cm. doblado por la mitad y con una funda adecuada puede ser un elemento de apoyo formando un puf o utilizarse directamente en el Sofa-cama Ximple con cojines.
  • También se puede reconvertir en un Sofá-cama Ximple con respaldo añadiendo un tatami.

Sofá-cama Ximple con patas de 15cm y respaldo de madera. · Estructura de 70x190cm. sin tatami o de 70x200cm. con o sin tatami. Sofá-cama Ximple con patas de 15cm. · Estructura de 70x200cm. con respaldo de madera y tatami.
Sofá-cama Ximple con patas de 15cm · De 70x200cm. con respaldo de madera, tatami y futon colecho de 70x140cm. con cojines de respaldo de 65x35x7cm. Sofá-cama Ximple con patas de 15cm. · De 70x200cm. con respaldo de madera, tatami y futon colecho de 70x140cm. más cojines óvalo laterales.

Funcionar de esta manera adaptando o quitando elementos según las nuevas necesidades que se van creando con el crecimiento de nuestros hijos es la mejor forma de conseguir que los materiales cumplan todo su ciclo de vida y nuestra inversión sea la más inteligente, adecuada y sostenible.


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